Rolando, Otoniel y Juan Guevara cumplen este lunes 21 años de prisión bajo acusaciones que organizaciones internacionales califican como arbitrarias e injustas. Los hermanos, junto a otros policías del 11 de abril, fueron condenados a 27 años y nueve meses por el asesinato de Danilo Anderson, en un caso marcado por testimonios falsos y fraude procesal.
Los supuestos testigos que sirvieron de base para la sentencia han confesado públicamente que fueron comprados por el Ministerio Público, lo que evidencia la arbitrariedad del proceso. A lo largo de más de dos décadas, los hermanos Guevara han permanecido incomunicados, viendo truncadas sus carreras y separados de sus familias, sumando 7.670 días sin poder regresar a sus hogares.
A pesar de poder optar a medidas alternativas desde 2011, el régimen venezolano ha rechazado sistemáticamente todas las solicitudes de liberación. Organismos internacionales como el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han solicitado formalmente su libertad, reconociendo la ilegalidad de su detención.
Tras pasar más de dos décadas en El Helicoide, los hermanos fueron trasladados en agosto de 2025, permaneciendo 70 días en situación de desaparición forzada antes de reaparecer en El Rodeo I, donde solo han podido ver a sus familiares en una ocasión. La CIDH les otorgó medidas provisionales, y la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos de la ONU ha manifestado preocupación por el estado de salud de Rolando.
Desde diversas organizaciones de derechos humanos y medios independientes se exige justicia inmediata y el cese de la tortura psicológica que afecta a los hermanos Guevara y a sus familiares.
Fuente: @papelon_informativo